El viernes pasado hubo frente a la Municipalidad de Tigre, una importante movilización de vecinos, más de 500 manifestantes. No reclamaban entradas para ver un partido de tenis o un recital de Pimpinela, tampoco reclamaban colchones y frazadas como decía una de las vecinas que participaba de la manifestación. El reclamo era por soluciones a las inundaciones que sufren varios barrios del Partido de Tigre, y por otro lado reclamaban en contra de la nueva normativa de construcción para el delta. No vamos a desarrollar en este artículo los motivos y reclamos de los vecinos, eso lo haremos en un próximo artículo. Lo que vamos a destacar en esta ocasión, y con esta movilización como ejemplo, es el tema de las libertades de prensa en el Partido de Tigre y el uso de las fuerzas de seguridad como fuerza coercitiva y de disuación.
Libertad de expresión y de prensa donde están?
El Estado, municipal en este caso, tiene el derecho de tomar las medidas que estime necesarias en cuestiones de seguridad ante la eventualidad de una movilización popular. Esto no está en discusión, aunque creemos que el uso de tan importante número de miembros del grupo GAD de la policía de la Provincia; y los vallados para mantener a los manifestantes lejos del Palacio Municipal son una exageración. Desde luego y como contraparte, los vecinos tienen el derecho de manifestarse libremente, sin ser víctimas de aprietes, apremios u actos disuasivos; mucho menos aún si esos actos disuasivos son encarados por personal policial o del COT.
Según se lée en el portal ANRed, los manifestantes tenían previsto movilizarse hasta el Palacio Municipal en dos micros dispuesto a tal fin, pero cuando los vecinos y vecinas se subieron a los micros aparecieron móviles del Centro de Operaciones Tigre (COT) y de la policía bonaerense, algunos con uniforme, otros de civil, a cargo de Juan Carlos Cáceres para detener el micro en Junín y Pichincha. Con el argumento de que no tenían papeles ni documentación en regla (cuando en realidad sí lo tenían) les prohibieron salir del barrio. De este modo, los vecinos y vecinas tuvieron que ir a la movilización por sus propios medios, en colectivos de línea y con la escolta del móvil del COT. Una vez llegados al centro de Tigre tuvieron que atravesar la misma situación.
Nota aparte: ¿y la chapa patente de este móvil del COT donde está?
El actual Intendente es un ferviente promotor de la creación de la policía comunal, lamentablemente el uso de estas fuerzas para amedrentar y disuadir al vecino insatisfecho son un mal augurio en ese sentido en función de las libertades individuales. No sería una mala idea exigir al Secretario de Protección Ciudadana Diego Santillán que se presente al HCD a dar explicaciones al respecto.
Por otro lado, sigue diciendo la fuente, que se hizo presente el periodista Hernán Cabello, de The Associated Press (AP), quien manifestó la intención de cubrir la actividad, pero tuvo problemas al momento de llegar a Tigre. "Venía en la camioneta que tiene el logo de la agencia y al bajar en la autopista a Tigre me pararon policías de la provincia, me tuvieron muchos minutos buscando alguna falta, tenía los papeles y cédulas al día, sin embargo no dejaron que pase a Tigre." explicó Cabello, y prosiguió "no pudimos pasar con mis compañeros, la camioneta se volvió a Buenos Aires, pero yo sí me vine en otro transporte y algunas declaraciones y pocas fotos pude hacer". A este hecho los vecinos respondieron que ya es "algo habitual" que en Tigre ningún medio masivo pueda pasar a cubrir manifestaciones que reclaman algo a Massa. Muchos cortes de ruta y movilizaciones pasan inadvertidas para el resto de la población nacional. "El otro día nos prometieron que venía Crónica a cubrir el corte en Ruta 9, si decidíamos levantarlo y nunca vinieron. Sólo querían que levantáramos el corte", se quejaron vecinos de Las Tunas.
