Una jornada histórica y una
oportunidad perdida. El 8N fue una jornada histórica, una movilización masiva a
nivel nacional y con extensión global; una movilización que no necesitó de una
persona o grupo que lo represente porque cada uno se representaba a sí mismo;
una movilización que no necesitó que Intendentes o sindicatos que dispusieran
de micros, pasaran lista, dieran choripán; una movilización cívica, pacífica y ordenada
que no estaba para defender a ningún grupo mediático en particular, no estaba
tampoco expresando ánimos destituyentes o golpistas. El 8N también fue una
oportunidad perdida, una oportunidad que la Presidente dejó escapar
para establecer puentes de diálogo con quienes no profesan del todo con ella.
El 8N no le estaba diciendo a la
Presidente que se vaya, no le estaba pidiendo que cambie el
rumbo de sus acciones de gobierno más allá de compartirlas o no. El 8N le
reconoce a la Presidente
el 54% de votos recibidos en las últimas elecciones, incluso muchos de los que
estuvieron el 8N fueron parte de quienes le dieron ese 54%. Si la Presidente hubiera
querido, con inteligencia y sin soberbias, podría haber encontrado algún
mecanismo, alguna forma de dejar de estar peleada con la mitad del país. Se
podría haber ignorado las declaraciones de algunos de sus funcionarios
imberbes, si ella hubiera tenido la grandeza de pensar en todos los argentinos
y no solo en algunos. Pero no quiso, lamentablemente no quiso tomar el guante.
Su arenga de “vamos por todo” parece ser una triste realidad. Sus declaraciones
del día siguiente echaron por tierra cualquier posibilidad de gobernar para
“todos” los argentinos. No tuvo la visión estadista, por lo contrario decidió
mofarse, ningunear y tratar de tarados a todos los “argentinos y argentinas”
que estuvieron en las movilizaciones. Tratar a quienes no piensan como ella de
tarados, sin capacidad de discernimiento, que son todos muñecos que ven una
realidad distinta gracias a los hilos tirados por grupos mediáticos. Un insulto
a la inteligencia de cientos de miles de manifestantes.
Hoy leo en un portal santafesino
que la Presidente
expresó que “cuando se le puede dar de comer a las mascotas es porque está
comiendo el pueblo”. ¿Que se puede decir cuando la primer mandataria del país
dice semejante estupidez? Trato de no insultar, pero con algunos dichos es
difícil no hacerlo. Gasta diez palos en reformar un baño y una cocina de la Casa Rosada. ¿Esto que
significará? ¿Qué si ella puede orinar en un baño tan costoso es porque todos
los argentinos tienen cloaca? Si al nene, Máximo, su hijo, se lo traslada en el
avión presidencial porque le dolía la rodilla; ¿quiere decir que todos los
argentinos tienen cobertura de salud asegurada? ¿Qué carajo pretende la Presidente de la clase
media que puede y quiere tener una mascota? ¿Qué las dejemos morir de hambre?
No gracias Señora Presidente, usted haga lo que quiera. Los que tenemos
mascotas queremos seguir teniéndolas. Comen los perros, comen los argentinos.
El 8N estaban los cientos de
miles de idiotas que ven la realidad distorsionada por Clarín y los grupos
monopólicos, y no los millones que ven la realidad tal cual es, como la que nos
dice el Indek, Guillermo Moreno, Larroque, D’Elía, Aníbal Fernández y otros
tantas mentes iluminadas que afortunadamente guían al pueblo en el sentido
correcto. El discurso que dio la
Presidente al día siguiente del 8N no me lo contaron, lo
escuché. Es cierto que lo escuché por TN, un canal del grupo monopólico malvado;
tal vez por eso lo escuché distorsionado, si bien era ella la que hablaba, tal
vez este grupo monopólico estaba usando algún dispositivo electrónico que
cambiaba las palabras que salían de boca de su excelentísima Señora Presidente.
En ese discurso ella decía que no había que victimizarse, y que hay que hacerse
cargo. Sería bueno que dé el ejemplo, que deje de usar luto y que deje de
hablar de él, que deje de jugar el papel de viudita y hablar de él para generar
empatías, y que se haga cargo de su propio gobierno. También mencionó el tema
de la Fragata Libertad ,
extrañada y dolida porque según ella hay muchos que se ponen del lado de los
fondos buitres. Libre interpretación que le dicen, pero como es ella la que
interpreta, no se puede discutir. El tema de el embargo de la Fragata no es si uno se
pone del un lado o del otro. El tema de la Fragata es que hubo funcionarios ineptos que no
vieron el peligro de que la
Fragata entre en aquél puerto africano. Ningún Ministro se
hizo o se hace cargo de sus propias ineptitudes, y la Presidente parece
apañarlos.
Antes del 8N decía la Presidente había
declarado “le pido a todos los argentinos que hablen con la verdad, si no te
gusta el gobierno por los derechos humanos, decilo”. Hipocresía en su máxima
expresión. Primero, que decir esto previo a una manifestación ciudadana es
querer meter presión contra quienes iban a manifestar. Segundo, ni el gobierno
ni su persona son los dueños de los derechos humanos. Sentar a Hebe de Bonafini
y Estela de Carloto en la primera fila de sus actos, no significa que sea la
heroína de los derechos humanos en la Argentina.
En ese sentido, podemos mencionar que Hebe de Bonafini no es
una referente en cuanto a derechos humanos. Una persona que se alegre por los
atentados del 11S no puede ser referente en ese sentido. Se le da entidad a
esta que mujer que se alegra de un atentado donde murieron muchos inocentes,
esta mujer que usa un espacio cedido a las Madres en la
TV Pública para que hable mal de la Virgen de Luján por ser la
virgencita que hay en comisarías y cuarteles, una mujer que está involucrada en
una causa de corrupción y estafa y que abandona a los trabajadores mandándolos
a reclamarle a Schoklender. Difícil comprender también que quien se ufana de
los derechos humanos tenga como canciller a quien en su momento, a través del
Diario La Tarde
que el dirigía, apoyaba el golpe militar y la dictadura. El mismo que apoyaba
la dictadura desde su diario, el mismo que en su condición actual de canciller
no se dio cuenta que la
Fragata podía quedar retenida en Ghana, y porque no decirlo,
el mismo que tenía planeado celebrar el casamiento de su hija en Punta del
Este.
Para que mencionar a otro
Fernandez, uno que fue Jefe de Gabinete, antes fue Ministro de Justicia, y
antes fue prófugo de la
Justicia cuando se escapó de la Intendencia de Quilmes.
Hoy es simplemente un personaje en el programa de Lanata. Un personaje que
cuenta con inmunidad parlamentaria que no entiende nada. Le dicen basta de
corrupción, basta de inseguridad; le piden libertad de prensa, Justicia
independiente; y él, como la sueca, solo dice, no entiende.
Andrés Larroque, una pinturita el
pibe de La Cámpora. Acusa
de narcosocialismo al gobierno santafesino. Simpático el bobo. Sobre todo
porque porque dice esto quien representa al oficialismo. Basta recordar la
causa del triple crimen, la ruta de la efedrina, y los aportes a la campaña de
Cristina 2007. ¿Qué hace el gobierno en la lucha contra el narcotráfico? ¿Está
radarizado el territorio nacional, están bien custodiadas las fronteras y
aduanas? Pero el pibe no se queda en eso. Según este payaso, los que
protestaban el 8N son “los que la están pasando bastante bien”. Lamento
informarle que los que estaban el 8N no eran miembros de La Cámpora , no eran gerentes
inútiles de Aerolíneas Argentinas, no eran funcionarios de este gobierno
nacional y popular que cobran sueldos de oligarcas. Y sigue diciendo, “que fue
una movilización amorfa, no había un criterio colectivo, los grandes problemas de la Argentina fueron
solucionados”. Pobre pelotudo, perdón, se me escapó.
¿Que se reclamaba el 8N? Nada,
boludeces. No hay que darle bola. Solo era un grupo minúsculo de la ultra
derecha, golpistas, destituyentes. Nosotros los K somos los super héroes, vamos
a salvar a la Argentina
de la opresión de los medios hegemónicos, del súper villano Héctor Magnetto.
¿Tomar el ejemplo de Dilma que en Brasil ya echó a varios funcionarios por
corrupción? Nunca, jamás. Nosotros no somos corruptos. Somos millonarios, pero
no corruptos. Sino pregúntele a Oyarbide. Algunos tuvimos la visión de hacer
grandes negocios inmobiliarios en la época de Martínez de Oz., o luego
comprando tierras por dos mangos para venderlas por cifras millonarias. Pero
nada, sino pregúntenle a Natalia Mercado, ella que era fiscal dijo que estaba
todo bien. Sino la encuentran, pregúntele a la mamá, Alicia Kirchner. Desde
luego que está la que comenzó su inmensa fortuna por su exitosa carrera de
abogada.
Un párrafo aparte para esta
valiente periodista, Cynthia García, que tuvo el coraje de estar entre los
manifestantes con el micrófono de 6,7,8. Estar rodeada de tantos amorfos, de
tantas personas llenas de odio, con espíritu golpista. Preguntaba,
repreguntaba, buscando la reacción violenta o la respuesta desubicada,
mostrando que todos los presentes solo repetían el libreto de Clarín. Ahora
habría que devolver el gesto y mandar una notera de TN a una marcha o
manifestación de La Cámpora ;
o tal ves solo a hacerle preguntas y repreguntas a la Presidente. No ,
me parece que eso no puede ser. Ella solo responde en Harvard, visteeee??
Me despido porque si no, no
termino más, recordando a otro muchacho feliz, al DJ liberal, al recanchero de
Amado, un piola bárbaro. Anda en Harley Davidson, tiene un departamento re súper
en Puerto Madero, unos negocios geniales con billetes, una amiga piola que
maneja la Casa
de la Moneda ,
y no tiene ningún quilombo con la Justicia.
Sino le gusta un fiscal, un juez o algo de eso; está todo
bien, consigue que los cambien y listo. No lo jodan, porque a él “no quiere trabajar,
no quiere estudiar, no se quiere casar, quiere tocar la guitarra todo el día y
que la gente se enamore de su voz”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario